Jardín Crecer, un programa destinado a los hijos de empleados rurales, ha comenzado su actividad este año con un enfoque en la recreación y la alimentación. Según Agustina Altobelli, coordinadora del centro, «acá lo que estamos haciendo son actividades recreativas, es un lugar de contención, de alimentación».

Los niños asisten desde las 8 de la mañana hasta las 6 de la tarde, donde disfrutan de un desayuno, almuerzo, merienda y colación, todo bajo la supervisión de profesores capacitados. «Les dan clases al aire libre, manualidades, cocina, entre otras actividades», explicó Altobelli.

El programa ha ampliado su rango de edad, permitiendo la participación de niños desde los 5 hasta los 16 años. Además, se presta especial atención a la salud y la nutrición, trabajando en conjunto con nutricionistas que diseñan menús adecuados para las necesidades energéticas de los niños, quienes están constantemente activos.

La mayoría de los participantes son de la zona, especialmente del barrio Las Palmas, donde muchas familias han sido reubicadas gracias a su vinculación con el campo. Altobelli mencionó que «tenemos muchos niños que viven acá en Las Palmas y otros que viven en Paraje, un poquito más lejos».

Con solo tres días de actividad, el programa ha registrado alrededor de 40 inscripciones, y se espera que el número alcance los 60 a medida que continúan las inscripciones. «Estamos esperando que se corra la idea de que acá se vienen, que acá se trabaja, que vengan los chicos, que no tengan miedo también de dejar a los niños», concluyó Altobelli.

Jardín Crecer, financiado por el RENATRE y implementado por la Cámara del Tabaco de Salta, se presenta como una valiosa iniciativa para el desarrollo integral de los hijos de trabajadores rurales, ofreciendo un espacio seguro y enriquecedor.