Desde hace una década, en los meses de enero y febrero, se lleva a cabo el programa «Brazos Abiertos», una iniciativa que busca brindar un espacio seguro y protegido para los hijos de los peones rurales en la temporada de cosecha. Desde las 8 de la mañana hasta las 5 de la tarde, los niños y niñas participan en actividades en las que reciben tres comidas diarias, mientras sus padres trabajan en las fincas.
El programa se inicia el 2 de enero y finaliza el último viernes antes del inicio de clases, cubriendo así los dos meses de verano, que coinciden con la época de cosecha más intensa. La empresa Alliance One es la responsable de financiar todo el programa, en su compromiso con la comunidad Tabacalera y en la lucha contra el trabajo infantil, en favor de los derechos de los niños, niñas y adolescentes.
La fundación «Vamos a Andar» es la encargada de organizar y gestionar el programa, diseñando y coordinando toda la logística necesaria. Además de los recursos aportados por Alliance One, la fundación también consigue otros recursos para hacer el programa aún más completo.
Adriana Sacheri, presidenta de la fundación «Vamos a Andar», destacó la importancia del programa y el compromiso de Alliance One en la prevención del trabajo infantil. Durante los diez años de existencia de «Brazos Abiertos», se ha brindado un espacio seguro y de calidad para los hijos de los peones rurales, permitiendo que sus padres puedan trabajar con tranquilidad durante el período de cosecha.
El programa «Brazos Abiertos» es un reflejo del compromiso de la empresa Alliance One con la comunidad Tabacalera y con los derechos de los niños. A través de esta iniciativa, se garantiza la protección y el bienestar de los hijos de los trabajadores rurales, fortaleciendo así el tejido social y contribuyendo al desarrollo sostenible de la zona.