En una publicación contundente, el Gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, arroja luz sobre las prácticas cuestionables que rodean al sector tabacalero en Argentina. En su declaración, Sáenz denuncia la influencia de un grupo de diputados que, según él, ignoran las realidades del interior argentino y las economías regionales, así como otro grupo que se autoproclama representante del sector tabacalero de manera dudosa.
El Gobernador expone que recientemente se ha eliminado del Capítulo Fiscal la modificación de los Impuestos Internos al Tabaco, una medida destinada a poner fin a los privilegios de una única empresa. Esta empresa, que se presenta como una Pyme a pesar de facturar más de 800 millones de dólares, importa tabaco de Brasil por más de 40 millones de dólares al año y opera sin pagar el Impuesto Interno Mínimo desde 2018, lo que le permite vender sus productos a precios considerablemente más bajos que sus competidores.
Las consecuencias de estos privilegios recaen principalmente en las provincias tabacaleras del norte, que han sufrido una pérdida estimada en más de 700 millones de dólares en recaudación del Fondo Especial del Tabaco (FET), afectando a una economía regional que sustenta a más de 200 mil personas y exporta el 80% de su producción. Además, esta situación tiene un impacto a nivel nacional, con una pérdida anual de 1 billón de dólares en concepto de Impuestos Internos que podrían ser coparticipados entre las 24 jurisdicciones del país y el Tesoro Nacional.
Ante esta situación, el Gobernador Sáenz hace un llamado al Presidente y a todos los ciudadanos argentinos para no ceder ante las presiones e intereses que están en juego. Se insta a no permitir que los privilegios de una empresa afecten el equilibrio fiscal y la justicia económica que tanto se necesita en estos tiempos desafiantes.
