La producción de tabaco en Jujuy pide un precio mínimo de 4.800 pesos por la clase máxima, justificando esta decisión a raíz de los altísimos costos que enfrentan. «Hemos tenido que adaptarnos a las nuevas reglas y condiciones de política nacional y económica, y eso implica reconocer el valor de nuestro producto, que es casi 100% exportable», afirmó Pedro Pascuttini, presidente de la Cámara del Tabaco de Jujuy.

Las negociaciones han sido intensas, y aunque Alliance One ha propuesto un aumento del 20%, la Cámara considera que esta oferta es inaceptable. «Lo que hemos pedido es justo y necesario para los productores, especialmente pensando en el futuro», subrayó Pascuttini. Las discusiones continuarán en febrero en Salta, donde se espera que se tomen decisiones clave.

En el contexto de la superproducción de tabaco en Misiones, que ha aumentado de 28-30 millones a 35 millones, los productores enfrentan dificultades adicionales. «La situación se complica con el tabaco que sigue fluyendo a Brasil, lo que afecta nuestro ordenamiento tanto agronómico como comercial», explicó Pascuttini. La Cámara ha solicitado a los compradores que consideren un precio provisorio hasta que se fije el precio definitivo.

A pesar de los desafíos, hay un fuerte deseo de continuar en la cadena productiva. «El productor es el primer eslabón; si no funciona, los compradores no tendrán tabaco. Todos somos parte de este universo tabacalero, y es esencial que nadie quede atrás», concluyó Pascuttini.

Esta reunión es crucial para el futuro de los productores jujeños, quienes buscan asegurar su lugar en el mercado y continuar con su labor en la actividad tabacalera.