Luego de años de pandemia, es cierto que el año que pasó, Argentina se vio con alguna ventaja dada la situación de ciertas cuestiones climáticas y baja producción que atravesó Brasil, lo que generó mayor demanda y por ende que el país vecino pudiese posicionar un buen precio lo cual se vio reflejado igualmente en Argentina.
Esta situación, si bien favoreció el comercio tabacalero nacional, se encuentra bastante distante de la situación brasilera, donde las características económicas son distintas, con el cese de la inflación y sin estar alcanzado por las retenciones a las exportaciones de tabaco, otorgándole una evidente ventaja competitiva. Sin embargo, Argentina forma un complemento, con lo cual necesita posicionarse como tal, buscando otorgar un tabaco argentino apetecible en sus variedades Virginia, Burley y Criollo.
“Está bueno encaminar la idiosincrasia hacia ese tipo de cuestión… yo creo que Brasil y Argentina son interdependientes y es bueno que en los dos destinos haya buena previsibilidad de negocios ” expresó Migue Testa, gerente CTJ en diálogo con Tabaco Argentino. te invitamos a mirar la entrevista completa.
